Espléndido
y paradisíaco es la joya del pacífico mexicano: el puerto de Acapulco. Venerada y famosa desde el
siglo pasado, ha sido inmortalizada por algunas de los filmes más importantes de
la era clásica del cine mexicano. Figuras como el mismísimo Elvis Presley
rodaron películas en los años 50. Es destino de estrellas de todo el mundo, sus
hoteles, residencias, y palacios lo convierten en una zona de lujos y de
extravagancias, por tanto es uno de los destino turísticos más importantes y
concurridos de todo México.
El puerto
de Acapulco es una gran ciudad cosmopolita
llena de vida, las noches y los días se están repletos de actividades, de shows,
de mucho movimiento y elegancia. La belleza natural de Acapulco y sus dos bahías, la de Santa Lucía y la de Puerto
Marqués, le ha dado el sobrenombre de la Reina de las playas mexicanas.
Los
acantilados magníficos y gran verticalidad, el color de las aguas del Océano Pacífico
que los baña, la vegetación tropical colorida y abundante, y un pueblo costeño
fiestero y alegre, hacen de este puerto el destino de vacaciones por
excelencia.
No
deje de visitar:- La Quebrada, donde clavadistas locales y de todo
el mundo realizan un salto al vacío desde lo alto de un acantilado, un show de más
de 55 años de existencia.- Parque Acuático de CiCi: una maravilla de
diversión, y de ecología concentradas.- Los mercados populares de la ciudad de Acapulco.- Los Spa de Guerrero y Boca Chica.- Punta Diamante, lo glamoroso, lujoso y moderno,
mezclado con divinas playas, bosques, y vegetación abundante.- El Fuerte de San Diego: una fortaleza militar
española de principios del siglo XVII:- La catedral de Nuestra Señora de La Soledad, la catedral
de Acapulco.
Caminar
por el Cerro de PInzona, y extasiarse con los murales de Diego Rivera.