Buena parte del prestigio que tiene
México en el turismo es gracias a las playas de Acapulco, pues este
singular destino tiene mucho qué ofrecer para cualquier viajante del mundo. Sus
paisajes son por demás hermosos y crean una atmósfera diferente para descansar
del bullicio de las grandes ciudades.
La playa de la Condesa es una de las más
famosas de este puerto y es ideal para pasar un buen rato con la familia, ya
que además de ser perfecta para practicar algunos deportes también cuenta con
una importante zona comercial y gastronómica en donde se pueden disfrutar de
verdaderos manjares.
Si de tranquilidad se trata, playas
Hornos y Hornitos son perfectas para los vacacionistas de Acapulco, ya que su
agua es muy tranquila y la arena es suave. También, al ser una zona de
pescadores, se pueden hacer recorridos en lancha o paseos en paracaídas.
La tradición dicta que Caleta y
Caletilla son las playas de Acapulco más acogedoras, además son
perfectas para bucear.